Ayer la vi.
Solo habían pasado 15 años. Ya no había lágrimas en sus ojos.
El tiempo las secó mientras endurecía su corazón.
Tantos años esperando este momento para reconocerle mi error y no supe que decir.
Se dio la vuelta y se marchó.
Richard del Rincón
No hay comentarios:
Publicar un comentario